La actitud como forma de vida

 La forma en cómo cada uno afronta la vida es lo que determina el camino entre la felicidad o la tristeza, entre la satisfacción y la frustración.

Porque aunque no lo creas, en la mayoría de las ocasiones, las cosas que nos ocurren es simplemente una cuestión de actitud.


                     "Una persona feliz no tiene un determinado conjunto de circunstancias,                                                                    sino un conjunto de actitudes"

Hay dos formas de ver la vida según la actitud que tengamos ante ella.
Por un lado, están aquellas personas que miran la vida desde una actitud muy pesimista y sin encontrar salida a todo aquello que les ocurre. De esta manera focalizan sus "desgracias" fuera de su órbita, evitando asumir responsabilidades.
Siempre la culpa de lo que les ocurre es culpa del "otro".
Y por otro lado, están aquellas personas que, por el contrario, prefieren mirar la vida con una actitud mucho más optimista. Son aquellas personas que no buscan culpables, buscan soluciones. No se esconden ante los problemas, no culpan al resto de las piedras que se encuentran en su camino, simplemente enfocan el problema y con la actitud adecuada lo enfrentan.


                                                        ¿ Y tú a qué grupo perteneces ?


Recuerda que cambiar de actitud es posible, solo tienes que conocerte bien, preguntarte por qué o cómo has llegado a ese punto. 

Haciéndote las preguntas adecuadas serás capaz de retroceder en el tiempo, revivir momentos que por algún motivo decidiste olvidar pero que, de alguna manera, tienes que revivir para poder dejar de ver todo de color negro y ser capaz de afrontar todas las situaciones que no te dejan avanzar.

Es ahí, donde empieza tu cambio de actitud, donde antes solo había rechazo a la confrontación de problemas, ahora es una lucha contra los mismos, donde antes todo era negatividad ahora hay positivismo, hay una luz al final del túnel, un cambio de perspectiva que te hace ponerte delante de los problemas y derribarlos.


          " Una actitud positiva provoca una reacción en cadena de pensamientos, eventos y resultados. Es un catalizador y desata extraordinarios resultados "


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